Pienso, luego escribo, para que me sigas a mí, como yo sigo a Cristo. Viéndolo todo desde la perspectiva de la fe y la razón. Mis pensamientos los llevo cautivos a la revelación de Jesús en la Palabra de Dios, la Biblia, mi norma suprema de fe y conducta. Confiando en mi único y suficiente Salvador, Jesucristo, a quien amo y por quien vivo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario